Jesús lo mencionó una vez.

Jesús describió la salvación como ser nacido del Espíritu.

5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.
6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.
7 No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.
8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu. (Juan 3:5-8)

Aunque Jesús sólo menciona el ser nacido de nuevo en los últimos versículos, podemos encontrar muchas otras referencias que usan el mismo tipo de expresión.

Pablo habló de esta experiencia como ‘nueva creación.’

De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas. (2 Corintios 5:17)

El autor de Hebreos habla de los niños en Cristo.

“12 Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido.
13 Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño” (Hebreos 5:12-13)

Pedro habla de los niños recién nacidos en Cristo.

“Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación” (1 Pedro 2:2)

Pablo también habla de los niños en Cristo.

“De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo.” (1 Corintios 3:1)

Pablo habla de su conversión siendo nacido fuera de tiempo.

“Y al último de todos, como a uno nacido fuera de tiempo, se me apareció también a mí.” (1 Corintios 15:8 LBLA)

Pablo habla en Gálatas sobre Isaac como hijo de la promesa nacido según el Espíritu.

“Pero como entonces el que había nacido según la carne perseguía al que había nacido según el Espíritu, así también ahora.” (Gálatas 4:29)

Juan habla de la experiencia de nacer de nuevo.

Si sabéis que él es justo, sabed también que todo el que hace justicia es nacido de él. (1 Juan 2:29)
“Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.” (1 Juan 3:9)  
“Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios.” (1 Juan 4:7)
“Todo aquel que cree que Jesús es el Cristo, es nacido de Dios; y todo aquel que ama al que engendró, ama también al que ha sido engendrado por él.” (1 Juan 5:1)
“Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe.” (1 Juan 5:4)
“Sabemos que todo aquel que ha nacido de Dios, no practica el pecado, pues Aquel que fue engendrado por Dios le guarda, y el maligno no le toca.” (1 Juan 5:18)

Y finalmente, Pedro habla de la misma experiencia.

“Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre.” (1 Pedro 1:23)

Entonces, hay numerosas referencias acerca de la experiencia de nacer de nuevo, y por eso, es una doctrinay enseñanzaprincipal para los cristianos.